En España se avecina una revolución, y yo quiero, yo voy a, formar parte de ella. Porque quiero un futuro mejor para mis hijos, por que no quiero arrepentirme en mi lecho de muerte mirando atrás y pensando que yo no hice nada, que yo no formé parte de ello.
España, el país de la pandereta, de la corrupción, del maltrato animal, del cohecho, la prevaricación, la mentira, la estafa. España, un país donde no hay justicia, donde los jueces justos son juzgados, donde el preso más viejo no tenía delitos de sangre, donde los crímenes de Marta del Castillo, MariLuz y tantas otros caen en el olvido y en la injusticia... España, mi querida España, esta España mía... esta España nuestra.
Y pasarán los años y diré "yo lo viví", si es que puedo decirlo, por que ésto cada vez más se parece a un complot en el que el pueblo calla y los políticos hacen su voluntad, donde dicen "baila" y nosotros bailamos, al son de las fiestas populares sin sentido, al son del fútbol y los deportes, y al son de la prensa rosa... Por que nos importan más las vidas ajenas que las nuestras propias, por cualquier cosa vale para desviar nuestra atención de lo que realmente importa...
Y mientras pasa la vida, la vida de millones de personas que pasan hambre, que no tienen derechos, que no tienen hogar. Por que pasa la vida de los millones de animales torturados, maltratados, abandonados, que sólo quiere vivir. Por que pasa la vida de millones de niños que crecen con una Kalasnikov en la mano, que a penas pueden sujetar con sus escuálidos brazos mermados por el hambre y la guerra. Por que pasa la vida de este planeta ante nuestros ojos, sumidos en el sueño del capitalismo, el sueño del poder, de la riqueza, y de la tontería hasta límites insospechados... Por que pasa la vida mientras nosotros la malgastamos en cosas sin importancia que nos entretienen, en vez de cultivarnos leyendo a las grandes mentes pensantes. Pasa la vida, pasa el tiempo del ser humano, por que estamos cabando nuestra propia tumba cada vez que masacramos a un semejante, a un no semejante, y a nuestra madre tierra...
Porque pasa todo esto sin que nos demos cuenta y sin que nos importe... Y es de ésto de lo que yo no quiero formar parte. Es de la revolución que se avecina de lo que hago mi bandera y mi religión, una distinta a esa que vive en la grandeza mientras otros viven en la inmundicia... y por suerte no soy yo, pero eso no me hace sentir mejor, si acaso afortunada... pero los hay que viven tan mal... Y a mi no me afecta, pero si que me importa. Hay que luchar por todos aquellos que no tienen voz, por que su voz fue callada por gente que miró hacia otro lado, por que ellos mismos miraron para otro lado cuando se impuso la injusticia... Qué mejor ejemplo que el pueblo griego, padre de la democracia, que ha sufrido en sus carnes el castigo del capitalismo y del fraude, y que sólo ha abierto los ojos cuando el pueblo era oprimido... ¿tenemos que esperar a estar igual? Hay un refrán muy sabio que reza "cuando las barbas de tu vecino veas pelar pon las tuyas a remojar"
Esta noche puede salir el sol, que ilumine nuestra revolución...
En la plaza de mi pueblo dijo el jornalero al amo... NUESTROS HIJOS NACERÁN CON EL PUÑO LEVANTADO...
“Cuenta la historia que el rey Salomón podía hablar con las bestias, las aves, los peces y los gusanos. También puedo hacerlo yo, y no necesito para ello ningún anillo encantado. Por lo que a mí respecta, no considero muy noble emplear anillos mágicos en el trato con los animales. Sin tales encantamientos los seres vivos cuentan, al que sabe escucharlos, las historias más maravillosas, que son precisamente las verídicas”
sábado, 18 de febrero de 2012
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